Sven Harmeling, coordinador de lucha contra el cambio climático de CARE International, se encuentra actualmente en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático en Varsovia, Polonia. Sven pronunció en relación al tifón Haiyan:
«En el primer día de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático en Varsovia, Polonia, gobiernos de todo el mundo expresaron su solidaridad con el pueblo de Filipinas el tifón Haiyan. Sin embargo, estas serían palabras vacías a menos que se tomen medidas reales y ambiciosas para enfrentar el cambio climático en la conferencia sobre el clima de este año. Todos los gobiernos deben comprometerse urgente y rápidamente a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero tan pronto como sea posible para poder empezar a evitar un calentamiento excesivo del planeta. Los países desarrollados, que contribuyen en gran medida al calentamiento global deben invertir mayores cantidades de dinero y recursos para ayudar a las naciones más vulnerables, como Filipinas, a elaborar medidas que les permitan adaptarse a las nuevas condiciones climáticas responsables de los los devastadores impactos de tormentas y otros eventos climáticos de largo plazo. Los países desarrollados también deben apoyar a los países en vías del desarrollo en su llamado por un nuevo y mundialmente respaldado «mecanismo internacional» (o proceso) para lidiar con la pérdida y el daño.
«La inactividad no es más una opción. Los países no pueden permanecer en estado de espera mientras los eventos climáticos se tornan extremos. Por el contrario, las naciones del mundo necesitan canalizar sus esfuerzos y trabajar en conjunto para disminuir las emisiones, ayudar a los más vulnerables a adaptarse y lidiar con las pérdidas y daños. El hecho de que algunos países sigan bloqueando una acción climática ambiciosa, siendo grandes contaminadores como Australia y Japón, no es más aceptable»
«La mala noticia es que lo peor está aún por venir, entre más se eleven las temperaturas globales. Se necesita tomar medidas inmediatamente, empezando en Varsovia. No se puede perder un solo momento»
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